El cielo de tu mirada

El cielo de tu mirada
me apasiona.
El viento que toca tus alas
entra en mi corazón.
El grito que representa tu dolor
se esconde en mi cabeza.
Vena por vena
pasa mi agonía
que me aprieta el pecho cada noche
y no me deja respirar.
Cada poesía
refleja lo que siento.
Doy gracias a la vida
por haberte conocido,
y tengo la esperanza
de que me abraces cada día,
y que me dediques esa sonrisa
que tanto me gusta,
y esas palabras...
que me elevan a lo más alto.
Quisiera mirarte y estudiarte sin descanso.
Y, sí, sufro
pero me gusta sufrir por ti,
sufrir por lo que más quiero.
Y aunque el mundo
no te escuche
y te cierre las puertas
siempre estaré contigo
para abrazarte y escucharte
y tendrás mis puertas abiertas.
Cada vez que me levanto
deseo ver tu rostro,
Gracias por ser esa luz que me guía.